Windows 11: Primeras impresiones

¿Qué? No es mi culpa que la UI me recuerde a OSX, era natural que le pusiera este wallpaper. 

Finalmente está aquí. Después de haber dicho con Windows 10 que ése sería "el último Windows", tenemos Windows 11, sistema desde el que estoy escribiendo esta review. ¿Que qué pienso? Tiene sus bordes sin afilar, como es normal cuando usas versiones beta de software (de hecho en este momento hay una lista de cosas a arreglar en un futuro), pero el sistema está bastante decente hasta el momento. Voy a ir por puntos, y al final postearé un resumen de lo que he visto en general.

1. Instalación.

Al momento de escribir esto no había una descarga (oficial) del ISO; la única forma de instalar el sistema propiamente tal era estar corriendo Windows 10, activar Windows Insider, unirse al canal "Dev" y actualizar. Para evitar toda la sobrecarga del sistema anterior, apenas la nueva Windows 11 estuvo instalada me fui a "Restablecer este PC" para devolverlo al estado de "recién instalado" (esto implica borrar todos los archivos de la unidad donde reside Windows). Hice eso con dos PCs, mi laptop del 2019 y mi PC de escritorio (los que aparecen en la barra lateral). 

En ninguno de los sistemas usé máquina virtual; los sistemas están corriendo directamente. Mi laptop tiene Windows 11 Home y mi desktop Windows 11 Pro. 

Lo primero a notar es el nuevo "OOBE" (Out Of Box Experience, el asistente que te pide información cuando el sistema está recién instalado) que tiene un look blanco, lindo, con animaciones y fácil de navegar. Lamentablemente este asistente no te permite elegir tu propia carpeta para tu perfil ni nada de eso, por lo que si inicias sesión con tu cuenta Microsoft [paso obligatorio en la versión Home que ni siquiera te permitirá avanzar si no tienes tu PC conectado a Internet] estarás obligado a que tu carpeta de perfil tenga  el nombre de tu correo electrónico. Por otro lado, la versión "Pro" te permite comenzar con una cuenta "offline" pese a que el instalador te va a preguntar 5 veces (no es una exageración) si en vez de una cuenta local no prefieres continuar con una cuenta Microsoft, advirtiéndote que sin ella podrás "perder funcionalidad". 

Una vez listo, el sistema te presentará el escritorio que todos hemos visto a estas alturas en pantallazos y fotos. 

2. Primeras diferencias

Para comenzar, por defecto Windows 11 viene con los iconos al centro, con el menú Inicio siendo el de más a la izquierda, seguido por un icono para búsqueda, otro para cambiar escritorios y uno para los widgets. No hay separación entre esos iconos del sistema y los iconos de aplicaciones, lo que podría resultar un problema para quien acostumbre a fijar muchos iconos, o para quienes utilicen Win+número para cambiar entre aplicaciones. Si no te gusta la alineación centrada puedes devolverlos a la forma clásica (izquierda).

El Explorador de Windows recibió un pequeño lavado de cara más allá de tener iconos nuevos; se fue la interfaz Ribbon para presentarnos una barra de herramientas muy similar a la que se puede ver en Dolphin (el explorador de archivos del entorno de escritorio KDE para Linux) y los iconos están muchísimo más separados que antes, aunque afortunadamente esto se puede revertir en Opciones de Carpeta > Ver > Reducir el espacio entre objetos (vista compacta). 

El explorador se inicia mostrando la carpeta "Acceso Rápido", y se eliminó la opción de iniciarlo mostrando "Este PC" (todavía se puede hacer con WinAero Tweaker, algo de lo que hablaré más adelante). 

La aplicación de configuración sí recibió un lavado de cara grande. Ahora todas las secciones están permanentemente visibles a la izquierda, mientras que a la derecha se puede llegar a las opciones eligiendo subsecciones, similar a cómo se haría en un teléfono. Si bien para mí estaba mejor el panel de control clásico (que todavía está incluido en el sistema, aunque escondido) esta aplicación es mucho, mucho mejor que la app de configuración que viene con Windows 10... y mucho más completa. 

Un gran problema que descubrí con Windows 11 tiene que ver con configurar los programas por defecto para diferentes tipos de archivo. No existe ninguna opción para establecer todos los archivos de música para un programa, o todos los archivos de video para otro, o todos los archivos de imágenes para otro: Hay que configurar los tipos de archivo a mano. Si quieres que un solo tipo de archivo se asocie a otro programa está bien, pero si quieres que todos los archivos de música se reproduzcan con Foobar2000 anda preparándote para establecerle las asociaciones a cada uno de los 30 tipos de archivos soportados por dicho programa, uno por uno. 

El nuevo botón de Widgets muestra información sobre el clima o noticias que podrían interesarnos. Salvo por el clima (me encantó que lo hubiesen puesto en Windows 10 a la vista, me dio lata que lo sacaran en Windows 11) no hay diferencia respecto a los widget bajo Windows 10 salvo la orientación a la izquierda.

Y llegamos a algo que estaba dejando para el final: El menú de Inicio. Desaparecen los "Live tiles" y tenemos un menú inicio sencillo y rápido de usar muy reminicente a la lista de programas "en columnas" de Stardock Start10. Creo que esta será la primera vez en años donde no me sienta obligado a usar Open-Shell/Classic Shell para poder tener un menú a mi agrado. Mi principal problema con este menú es que muestra tu nombre. La idea no es nueva; bajo Windows XP el sistema también mostraba tu nombre. Sin embargo, en este caso si usas una cuenta Microsoft va a mostrar ahí tu nombre real completo, algo que puede convertirse en un problema si haces streaming y no quieres que la gente se entere de tus datos personales. No hay opción de deshabilitar dicha función. Y tal como en Windows 10, si presionas la tecla de Windows y escribes, el sistema buscará inmediatamente lo que le pidas. La búsqueda, al menos en mi experiencia, es más precisa que en el sistema anterior, y bastante más rápida.

3. Funciones avanzadas

Más allá de los cambios visuales, Windows 11 comparte mucho con Windows 10, pese a los requisitos del sistema que han sido aumentados con respecto a la versión anterior. A nivel de núcleo el sistema es muy similar (al punto que AIDA64 identifica el sistema operativo como Windows 10, cosa que no ocurre con Speccy). En general, si tu software corría bien en Windows 10 debería correr bien en Windows 11, y la compatibilidad es tal que muchos de los tweaks de WinAero Tweaker (herramienta de la que he hablado en otra ocasión) funcionan correctamente en el nuevo SO. Tampoco he tenido dramas con los drivers "normales"; no he tenido ningún drama usando Clip Studio Paint ni Gimp con una tablet Cintiq 13HD (tras instalar el driver correspondiente, por supuesto).

Windows Terminal viene incluido con Windows 11, aunque no está establecido como la terminal por defecto. La versión incorporada es la 1.8.1521.0, que es la última versión en el canal "estable" a momento de escribir esta reseña.

MMC (La consola de administración de Microsoft) sigue ahí sin tener ningún cambio sustancial (lo que es en cierto punto bueno). En otras palabras, la administración de discos, hardware, visor de eventos, servicios, políticas de grupo, etc. no cambian en relación a Windows 10. 

La función de escritorios múltiples de Windows 11 permite establecer un wallpaper diferente para cada escritorio, permitiendo así separarlos aún más por tema. Eso sí, se ve que la característica requiere un PC bastante potente- en mi máquina el cambio entre escritorios es relativamente lento.

Y finalmente, Windows 11 está deshaciéndose del lastre dejado por Internet Explorer. Hasta donde pude constatar (con el caso de la aplicación de Twitter), las aplicaciones que utilizan web embedido están usando el motor de Chromium/Edge. Sin embargo no he hecho un análisis exhaustivo al respecto; sólo digo lo que vi en un par de horas y podría estar equivocado en este respecto.

Durante el stream donde se anunció Windows 11 se dijo que este SO tendría soporte para correr aplicaciones de Android. Sin embargo, dicho soporte todavía no está agregado al sistema, por lo que es seguro asumir que llegará más tarde durante este año.

4. Finalmente

Esto fue básicamente un primer vistazo al sistema. Como dije, es una versión beta, por lo que hay varios pequeños errores a corregir, y Microsoft está recibiendo todo el feedback que puede usando su herramienta "Feedback Hub". 

Funciones básicas... me gustó. La mayoría de los cambios que vamos a percibir son cambios a nivel visual que se agradecen, pese a que el sistema operativo tiene un aire a OSX en este momento, sobre todo el tema claro/blanco. A nivel de núcleo Windows 11 se "siente" algo más pesado que 10, aunque eso ya no es tema considerando los requisitos de sistema. A decir verdad, Windows 11 no se siente como un "cambio radical", sino más bien como una evolución natural. Lo cual es bueno, porque todos sabemos qué fue lo que ocurrió cuando Microsoft intentó forzar un cambio radical.

Como cosa adicional, he visto a mucha gente quejándose por el requisito de TPM y diciendo que debido a eso este es "un nuevo Windows Vista". A decir verdad, discrepo. Windows 10 todavía tiene soporte hasta el año 2025 y para entonces la vasta mayoría de la gente va a haber actualizado sus sistemas a algo compatible con 11. 

¿Deberías instalarlo ahora? Si no eres una persona a la que le encanta probar las cosas a medias, a decir verdad... no aún. Windows 11 se ve como un excelente SO, pero en este momento los detalles pueden disminuir la experiencia y de paso es muy posible que con las actualizaciones que se vienen se generen errores nuevos. Ten paciencia; el sistema está siendo trabajado y si bien no hay una confirmación oficial de la fecha de salida (que los rumores establecen a mediados de Octubre) el mismo se vendrá pronto. 

Bonus Track: Otros detalles menores.

1. El arranque es un pestañeo. Sin embargo no pude configurarlo para que arrancara sin tener que ingresar usuario y contraseña.
2. No se puede agregar nada a la barra de tareas; aplicaciones como Lenovo Vantage ya no pueden tener un applet donde muestre lo que queda de batería, por ejemplo.
3. No se puede poner el botón de Inicio a la izquierda y los iconos al centro; o todo o nada.
4. Ya no hay widget de clima. La sección "Widgets" ahora contiene esa información y más. Como detalle adicional, la sección de widgets no se puede mover a la derecha.
5. No tuve dramas corriendo software antiguo. Si tu programa corre bien en Windows 10, correrá bien en Windows 11. Al menos hasta ahora.
6. El sistema recién instalado ocupa unos 35 GB de espacio. 
7. Pese a que hace unos meses salieron noticias muy alarmadas porque "Microsoft se está deshaciendo de los iconos viejos", Windows 11 todavía viene con moricons.dll y pifmgr.dll, uno de los cuales viene desde Windows 3.0 y el otro viene desde Windows 95. 
8. El sistema está lleno de animaciones por todos lados, algunas más sutiles que otras. Desde cambiar tamaño/maximizar/etc hasta los deslizamientos de los menús. 
9. El sistema trajo de vuelta el sonido de arranque.
10. ¿Te molesta que, si construiste tú mismo tu sistema, diga que tu fabricante es "To be filled by O.E.M"? Cambiarlo es muy fácil: En el registro localiza la clave:  HKEY_LOCAL_MACHINE\SYSTEM\ControlSet001\Control\SystemInformation. Ahí puedes cambiar SystemManufacturer y SystemProductName por lo que quieras.

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TPM 2.0: Cómo saber si tu PC lo soporta (y cómo activarlo)

Gracias a un leak (una filtración) ha habido bastante conversación relacionada con Windows 11, respecto principalmente a su nueva interfaz y al rendimiento de los programas. Sin embargo, algo en lo que no se ha ahondado mucho es en los requisitos del sistema. He visto sitios de noticias que mencionan que Windows 11 requiere "TPM 2.0", sin embargo no veo a nadie explicando qué cresta es un TPM y por qué Windows lo requiere. O más importante aún, cómo se activa. 

Vamos a lo primero, la explicación. TPM (Trusted Platform Module) es un estándar internacional para tener un microcontrolador diseñado específicamente para asegurar el hardware mediante claves criptográficas. O puesto en una forma más sencilla de entender, es una especificación que ciertos chips deben seguir para proteger información usando claves de cifrado. 

En teoría, para asegurar un PC se requiere de un chip físico. En la práctica la mayoría de los procesadores y chips actuales ya soportan la especificación sin requerir un dispositivo adicional. Otra razón por la que este es un requisito pervasivo es que TPM usualmente es transparente para el usuario normal: Si el PC lo tiene, lo usará. Si no lo tiene, bueno, no lo usará, pero tampoco le advertirá al usuario de ello. 

Ahora, ¿Cómo saber si tu PC soporta TPM? Es actualmente fácil.

1. Abre Windows Defender.

2. Dirígete a "Seguridad del dispositivo"

3. Haz clic en "Detalles del procesador de seguridad"

Ahí debería salir la información del TPM soportado por el sistema. Si Windows no es capaz de encontrar un chip TPM instalado, te lo dirá.

Ahora, aquí está el dato interesante. Si tu PC es del 2016 o más reciente, es muy probable que sí tenga una forma de TPM que se puede activar desde la BIOS/UEFI. Para ello debes hacer un reinicio especial que te lleve a dicho programa (en el pasado era cosa de presionar "Supr" o F2 durante el arranque, pero eso ya no se usa). 

Para reiniciar en modo BIOS/UEFI desde Windows 10 simplemente presiona Win+i para abrir el panel de configuración, vete a "Actualización y seguridad", y en la sección "Recuperación" usa el botón "Reiniciar ahora" que está bajo "Inicio Avanzado". En la pantalla siguiente vete a "Solucionar problemas", luego a "Opciones avanzadas" y finalmente "Configuración de firmware UEFI". 

ADVERTENCIA

Modificar los valores de la UEFI sin saber lo que se está haciendo es extremadamente peligroso y corres riesgo de inutilizar completamente tu computadora, más aún si te pones a trastear liberalmente con las opciones de overclock. Siempre infórmate antes de cambiar cualquier cosa, y siempre es buena idea anotar los valores antes de cambiar nada, en caso que fuese necesario volver a ellos.

Lamentablemente no puedo guiarte con los pasos exactos ya que cada placa madre tiene una BIOS diferente. Si tienes una PC con procesador Intel, busca y activa la opción "Intel Platform Trust Technology"; si tienes una PC con procesador AMD busca y activa la opción "AMD fTPM". De paso, si no está activado, activa Secure Boot (que también es requisito para Windows 11). Cuando todo esté listo guarda y reinicia. Ahora el sistema debería reconocerte que es compatible con TPM 2.0. Si las opciones no existen, estás sin suerte.

También hay que tener en cuenta qué revisión de la BIOS se está usando. Hace unos días yo me quejaba porque parece que iba a tener que comprar un chip físico, pero todo se solucionó actualizando la BIOS, algo que no recomiendo si no tienes una UPS o nervios de acero... y un PC secundario en caso de problemas. 

En todo caso, una vez que el sistema se reconozca a sí mismo como compatible con TPM 2.0, ya deberías poder instalar Windows 11 con tranquilidad... siempre y cuando cumplas con los otros requisitos (64GB de almacenamiento y 4 GB RAM).

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Reproductor de Windows Media 9 en Windows 10 (Y Windows 11)

Empezó Junio, el mes de la aceptación LGBT. El ver arcoiris por todos lados me alegra el espíritu, y en esta ocasión me trajo un recuerdo computín: El Reproductor de Windows Media.

Este reproductor venía por defecto en Windows pero era una aplicación sencilla; cuando salió la versión 7.0 (que venía incorporada con Windows ME) renovó su look para verse mucho más moderno (y para soportar bastantes cosas relacionadas con DRM de la época). Ese mismo reproductor se actualizó; Windows XP venía con la versión 8 y poco después salió la versión 9. 

Las versiones que salieron después de la 9, a mi juicio, no eran buenas. Reproducían música pero cambiaron la interfaz de usuario por una enfocada totalmente en la biblioteca (posiblemente tomando ideas de Foobar2000, MediaMonkey o algún otro reproductor por el estilo) escondieron los skins y las visualizaciones (estaban ahí pero había que verlos con un clic derecho, y sólo traía un par de visualizaciones) y, con la llegada de las aplicaciones "modernas" Microsoft empezó a esconder dicho reproductor en favor de Microsoft Groove. 

Pero al grano. Me carga cuando los blogs malgastan párrafos y párrafos contando una historia antes de ir a la "carne" del post, y me acabo de dar cuenta que acabo de hacer exactamente eso.

Instalar el Reproductor de Windows Media 9 bajo Windows 10 u 11 no es lo más fácil que hay principalmente debido a Microsoft intentando bloquearlo, pero tampoco es lo más complicado que existe. Requeriremos de dos herramientas: 7-zip y Resource Hacker, ambas gratuitas. 

1. Nos descargaremos el instalador de Windows Media Player 9 desde cualquier sitio que lo hostee. Puedes conseguirlo funcional en oldversion.com, o puedes sacarlo de MEGA. Es decisión tuya. Por supuesto, evita sitios que meten malware o sus propios instaladores.

2. Haz clic derecho en el instalador y extráelo en una carpeta cualquiera con 7-Zip. 

3. Asegúrate de desactivar el Reproductor de Windows Media normal. Eso se consigue ejecutando (con Win+R) appwiz.cpl, yendo a la sección de activar o desactivar componentes de Windows y desactivando el reproductor.

4. Ahora, en la carpeta extraída, abre el archivo setup_wm.exe usando Resource Hacker. Abre Version Info > 1:xxxx, y ahí reemplaza todas las entradas que dicen 9,0,0,2980 con 17,0,0,2980. (xxxx es un número de 4 cifras que representa el idioma del instalador. Usualmente es 1033). Presiona F5 para compilar los cambios.

5.En String Table abre la 11. Ahí toma la línea 165 y elimínala. Presiona F5 para compilar.

Estos dos pasos nos permiten evitar el error de "Este instalador es muy viejo y Windows no lo soporta".

6. Ahora sí ejecuta setup_wm y sigue las instrucciones.

El reproductor debería estar instalado. Queda un paso adicional. Como es seguro que te va a llover una inundación de errores de script, dale que "sí" o "no" a todo hasta que dejen de aparecerte mensajes. Ve a la configuración del reproductor y desactiva la opción de iniciar en la biblioteca multimedia. 

¡Ya está! Windows Media Player 9 bajo Windows 10. A veces se taldea con algunos MP3 y no abre formatos como FLAC (salvo que instales algún pack de códecs), pero es el mismo reproductor de tu infancia. 

Bonus track: Visualizaciones arcoiris

La historia del comienzo mencionó los arcoiris, por una buena razón. Windows ME traía un set de visualizaciones llamadas "Colores musicales". Instalarlas no es difícil. 

1. Descárgate el archivo wmpvis.dll. Existen copias de este archivo en internet, pero en general la versión que me gusta es la 7.0.0.1440 que trae una visualización llamada "WinME 3D". Windows XP traía una versión descolorida y azul llamada "Cristales de hielo" que a decir verdad no eran lo mismo..

Puedes obtener la versión correcta aquí. 

Nota

Windows Defender arroja un falso positivo bajo Windows 11, por lo que deberás manualmente permitir la descarga. Según Microsoft esa dll es "peligrosa". En todo caso, tú decides si sigues con los pasos o no.

2. Copia el archivo a la carpeta de Windows Media Player que encontrarás en C:\Program Files (x86).

3. Abre una terminal en modo administrador. Para eso simplemente haz clic en Inicio, escribe cmd (o lo que sea que uses de terminal), hazle clic derecho y en "Abrir como administrador".

4. Ingresa el siguiente comando:

C:\WINDOWS\SYSWOW64\Regsvr32.exe "C:\Program Files (x86)\Windows Media Player\wmpvis.dll"

Si lo hiciste bien debería salirte un mensaje diciéndolo.

4. Listo. Ya está. Inicia el reproductor y verás que la visualización ya es parte del mismo. Ahora puedes eliminar los instaladores y archivos temporales usados para todo este kerfuffle; la única carpeta que debe quedar es "Windows Media Player", que está en C:\Program Files (x86).

Bonus track 2: Skins!

¿Echas de menos los skins/pieles del original? Te tengo cubierto. Descárgalos de aquí. 

Lo único que debes hacer es descomprimir el archivo .zip en la carpeta Skins que está dentro de la carpeta del reproductor (C:\Program Files (x86)\Windows Media Player).

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