
Quienes me conocen de mucho tiempo saben que el sardónico I Wanna Be The Guy tiene un lugar grande en mi corazón. Cuando me contaron que salió una remasterización hace unos días no lo podía creer, fue como si se me detuviera el corazón. Desde que este juego salió en el 2007 (cuando los juegos indie estaban comenzando a revolver la olla) ha generado una multitud de fans, seguidores e imitadores: Tantos que se pueden dividir en tipos (Los "bullet hell", los de precisión, los troll y los que son...