Configurando Windows 11, Parte 3: Configuración granular

Por fin, el último "capítulo" de esta "guía" (Parte anterior aquí). Y al momento de escribir esto ya están apareciendo formas de "tweakear" más cosas en Internet, con el tiempo que ha tenido la gente para experimentar con la versión final del sistema. Al mismo tiempo es interesante cómo la gente está tomándose el update con cautela, algo que no ocurría antes. 

Pero vamos allá. Ya configuramos la instalación y las carpetas. ¿Qué nos queda? Bueno, aquí lo vamos a ver. 

1. Tweaks básicos con WinAero Tweaker

Estos tweaks se pueden hacer a mano pero es mucho más rápido y menos engorroso hacerlos con dicha herramienta. En general te diría que te pases por todas las opciones y configures lo que más te guste, pero acá pondré las que (a mí) me acomodan más. 

• Classic Full Context Menus: Activada. Esta opción elimina el menú "simplificado" que aparece al hacer clic derecho en el escritorio o en las carpetas, y te devuelve el menú completo de toda la vida, sin tener que elegir "Mostrar todas las opciones" primero.
• Enable Classic Taskbar: Desactivada. Puede resultar tentador habilitarla, pero no sólo debes restaurar el menú inicio (instalando algún programa como OpenShell o Start11) y reactivar los iconos junto al reloj, sino que la barra hoy está rota, con iconos desapareciendo de vez en cuando.
• Ads and Unwanted Apps: Siempre marqué esta opción bajo Windows 10 para desactivarla. No sé si tiene algún efecto bajo Windows 11, pero la activo igual por si acaso.
• Windows Installer in Safe Mode: Esta opción debería estar siempre activada si no tienes requisitos especiales de seguridad. Por defecto el servicio de Windows Installer no funciona cuando se reinicia Windows en modo seguro, lo que significa que si instalaste un programa que usa dicho servicio y dicho programa estropeó el explorador o algo por el estilo, no podrás reiniciar en modo seguro para eliminarlo. Esta opción lo activa de vuelta (y sí, ha sido un salvavidas en un par de ocasiones).
• Customize This PC Folders: Esta opción agrega o elimina las carpetas que aparecen al iniciar el explorador, encima de las unidades de disco. En mi caso simplemente las eliminé dado que las carpetas que necesito las tengo al costado. Sin embargo, si quieres carpetas acá (incluidas carpetas de sistema como la carpeta "Modo dios" o el panel de control clásico, siempre puedes añadirlos. 
• Drive Letters: Esta la mencioné en la parte anterior, pero usualmente elijo "Drive letters before labels" más que nada por un asunto de orden. 
• Hide Drives: Esta opción es buena si tienes (por ejemplo) una partición para datos instalados pero que no necesitas ver constantemente. Por ejemplo, una carpeta con archivos temporales o algo por el estilo. Lo bueno es que aunque la unidad esté oculta, aún estará ahí, y puedes acceder a ella escribiendo su letra seguido de dos puntos (ej. D:) en el cuadro ejecutar o en la barra de dirección de otras carpetas.
• Navigation Pane - Custom Items: Esta opción te permite agregar carpetas al panel izquierdo. Las carpetas que agregues acá serán cada una su propia "sección"; no irán junto con las demás en Acceso Rápido. El problema de usar esta opción es básicamente la imposibilidad de reordenar las carpetas para que aparezcan antes o después de otras.
• Disable Telemetry: No sabría decirlo con certeza, pero siento que bajo Windows 11 esta opción no tiene efecto. Lo menciono porque no me sorprendería si alguien me hace el comentario al respecto.

¿Y Víctor, este post va a ser simplemente propaganda glorificada a Winaero Tweaker? Nah, estos fueron los tweaks que aplico con el mismo pero los que se vienen ahora no lo usan. 

2. Cambiar la ruta de Microsoft OneDrive

Por defecto Windows (desde el 8 en adelante) establecen la carpeta de OneDrive dentro de tu carpeta personal. Y está bien... si no tienes unidades de disco adicionales. Pero cuando tienes varias unidades de disco y estás organizando tus datos al detalle de forma granular, puede que desees que OneDrive esté en algún otro lugar. 

OneDrive no permite (por defecto) el cambiar la carpeta como lo haría Dropbox. Lo que debes hacer es un clic en OneDrive e irte a la configuración, y desvincular tu PC. Te va a preguntar si estás seguro, tú dale que sí. Cuando se desconecte (puede tomar un minuto o dos), mueve la carpeta de OneDrive a su nueva ubicación de forma manual con el explorador de Windows.

Una vez hecho ello, simplemente debes iniciar sesión en OneDrive de nuevo. Cuando se te presente el diálogo "Tu carpeta de OneDrive" debes hacer clic en "Cambiar ubicación" (Change Location). Navega hacia la carpeta que moviste y elígela; te va a decir que la carpeta ya existe y te va a preguntar si quieres usarla o elegir otra. Dale a "usar esta carpeta" y listo. 

Este método también se puede utilizar para mezclar los contenidos de dos cuentas de OneDrive; te conectas a una bajas todo, te desconectas, te conectas a la otra apuntando a la carpeta anterior". 

Cuando esté listo el sistema sincronizará las carpetas de forma normal y desde ahora en adelante cada vez que te dirijas a "OneDrive" el programa se irá a dicho lugar. 

Afortunadamente, Dropbox es algo más sencillo al respecto: En las preferencias del mismo te puedes ir a la sección "Sincronización" y ahí tendrás la opción de mover la carpeta a otro lugar. Google Drive, por otro lado, no sólo te permite establecer una carpeta para el contenido de tu cuenta de Drive, sino que también te creará una nueva unidad virtual de disco a la que puedes cambiarle la letra desde la configuración. 

3. Configurando programas al inicio

Una cosa que muy posiblemente notes cuando se inicia el PC es que Windows te insiste que te conectes a Teams. Puede incluso que te conecte sin preguntarte. Esto puede ser extremadamente molesto, sobre todo si trabajas solo o nadie en tu organización usa Teams. Si lo cierras, volverá cuando reinicies. Pero ese comportamiento se puede cambiar con facilidad.

Presiona CTRL+Shift+Esc para abrir el administrador de tareas. Haz clic en la opción que dice "Más detalles", y luego a la pestaña que dice "Inicio". Es aquí donde podrás configurar qué se inicia con el PC y qué no. He visto a mucha gente comentando "Pero si los discos de hoy son rápidos y la RAM es abundante, no hay que andar desactivando programas para acelerar el PC", pero discrepo. Después de muchas malas experiencias con programas terriblemente optimizados (los peores siendo las apps que monitoreaban las tintas y los perfiles de la impresora-- ¿Por qué un programa así me debería enlentecer el sistema completo a la mitad de su velocidad simplemente por estar ahí?), estar pendiente de qué se inicia y qué no es casi un reflejo. 

De vuelta al post. Los programas base que usualmente desactivo son Cortana, Microsoft Teams, y "Enviar a OneNote". Pero eso es porque el PC está limpio (recuerda, instalación limpia). Si instalo programas que se agreguen voy simplemente a considerar si vale la pena el tenerlos andando ahí durante el arranque o no, y muy posiblemente remueva todo lo que no sea específico o mandatorio. Hace algunos años valía la pena tener, por ejemplo, OpenOffice "pre-cargado" ya que los discos duros eran muy lentos, e iniciar un programa como Writer podía tomarte mucho tiempo. Hoy en día que la mayoría de la gente tiene SSDs dicho problema pasó a ser cosa del pasado.

Otros programas que usualmente remuevo del arranque son programas específicos de fabricantes de notebook que en realidad no hacen nada salvo monitorear si salió un driver nuevo o algo por el estilo. Dado que ese evento no es algo de todos los días, el tener constantemente un programa monitoreando si hay drivers nuevos (y enviándole información de tu PC a le empresa), no considero a esos programas algo positivo. Esto también aplica a programas de monitoreo de temperatura. Si bien el tener esos programas a la vista cuando se configura/arregla un PC o los primeros días después de armar el sistema es algo bueno porque permite descubrir errores, no recomiendo usarlas por más tiempo que un par de días; dichos programas mantienen el PC constantemente ocupado y, sobre todo si tu sistema no es de los más poderosos, definitivamente te lo van a enlentecer, sobre todo a la hora de jugar. 

Esto también aplica a antivirus. No voy a discutir acá sobre qué antivirus es mejor y cuál no, pero el tener un antivirus funcionando con todas las protecciones activas a la vez definitivamente va a hacer que el PC vaya más lento. 

Por supuesto, supongo que no necesito explicar por qué el tener dos o tres antivirus instalados al mismo tiempo es una idea horrible. 

Puedes también desactivar Steam y otros lanzadores de juegos si no usas sus redes sociales con frecuencia; en realidad para lo único que sirve tenerlos constantemente abiertos es para que los juegos se mantengan actualizados en todo momento. Por supuesto, depende de ti el pensar si esa ventaja vale la pena en enlentecer tu arranque en algunos segundos. 

Ahora, ¿Qué pasa con el paso contrario? ¿Qué ocurre si necesito agregar un programa para que se inicie junto con mi PC? ¿Qué ocurre si me hice un programa personal que cada media hora me recuerde que debo hacer mis prácticas del día?

Presiona Win+R en el teclado, y escribe shell:startup. En la carpeta que se abrirá puedes agregar un acceso directo a lo que quieras, y la próxima vez que Windows se inicie, ejecutará todos los accesos directos de dicha carpeta. Es básicamente la forma de abrir la carpeta "Startup" que existe de hecho desde Windows 95 (o incluso antes, que en Windows 3.1 era un grupo de programas con el mismo nombre y la misma función).

Casi me olvidaba que necesito que mi PC me recuerde cada media hora que soy un flojo.

Mirando todo esto me acordé que no he instalado Cobian. Ya vuelvo.

4. Ajustando los tipos de archivo

Este paso es molesto, y no me voy a cansar de decirlo. Este paso se siente casi como si Microsoft se hubiese enojado con la gente que cambia los programas que vienen instalados por defecto con alternativas mejores y se hubiese desquitado obligando a la gente a establecer los tipos de archivo uno por uno. 

Supongamos que instalaste un visor de imágenes como FastStone ImageViewer o Irfanview (ambos son excelentes y los recomiendo) y quieres que éstos abran las imágenes cuando les hagas doble clic. Abre la aplicación de Configuración con win+i, elige la sección "Aplicaciones", luego ve a "Aplicaciones predererminadas". En la sección que se abrirá, haz clic en el programa que deseas (en el caso de ejemplo, FastStone Image Viewer). Ahí tienes una lista con todos los tipos de archivo que pueden ser abiertos con dicha aplicación; ahora es cosa de hacer clic en la que quieres cambiar, elegir FastStone Image Viewer cuando te pregunte, decirle que sí si te pregunta si estás seguro, y repetir esto a mano para cada uno de los tipos de archivo correspondientes.

Una alternativa a esto es encontrar en tu PC un archivo del tipo que quieres cambiar, darle clic derecho y irte a sus Propiedades. Ahí tendrás una opción llamada "Cambiar..." que te permitirá modificar la aplicación predeterminada para dicho tipo de archivo.

5. ¿Qué más queda?

No lo sé. Windows 11 es lo suficientemente familiar como para trabajar con el mismo de una forma similar a la que se hacía con Windows 10 (Tanto así que la mayoría de las cosas explicadas acá también se pueden hacer en Windows 10). Algunas cosas salieron perdiendo, como el hecho que ahora la barra de tareas no pueda configurarse verticalmente. (O sea, de poder se puede, pero está rota, y el menú inicio no funciona bien). 

Es cosa de darle tiempo, yo creo, muy similar a como fue con Windows 10, que tuvo un inicio accidentado pero mejoró con el tiempo. Al menos eso es lo que espero que pase con este sistema, que se siente más como una evolución suave que como algo totalmente nuevo. No es como si eso estuviese mal; la última vez que Microsoft intentó forzar algo nuevo terminó con uno de sus fracasos recientes más grandes (Windows 8). 

Y de hecho también es cosa de esperar a ver qué crean los desarrolladores third-party. Por ejemplo, Stardock (que ya a estas alturas no debería ser sorpresa) ya está vendiendo por 5 dólares la beta de Start11, un programa que no sólo ofrece la opción de volver al menú de inicio antiguo, sino que también la de proveer con un menú de inicio similar al de Windows 11 pero sin su falla más grande (El espacio vacío que te reclama si desactivaste los archivos más recientes). Y no me sorprendería que eventualmente Classic-Shell/Open-Shell también reciban una actualización al respecto... si es que sus desarrolladores se animan, dado que el último update al mismo es de hace ya varios meses atrás. 

En cualquier caso, lo único que sé es que si sale alguna personalización que me resulte interesante, la voy a compartir, ya que este es el sistema que uso y, al menos para mí, el tener la capacidad de hacer que un sistema funcione de una forma que te resulte cómoda es importante. Y eso va más allá de simplemente cambiar un fondo de pantalla o los cursores del ratón. 

Nos vemos en la próxima ocasión.